Al igual que la mayoría de las ciudades noruegas, el Ålesund de principios del siglo XX estaba construido principalmente en madera. Tal como se puede apreciar en las pocas fotografías que nos han llegado de la época, su núcleo urbano se apiñaba alrededor del puerto, en el estrecho canal que separa las islas de Nørvøya y Aspøya. Durante la madrugada del 23 de enero de 1904, se desató un incendio en una fábrica ubicada en ésta última isla. A pesar de los esfuerzos por sofocarlo, el fuerte viento del oeste propagó el fuego por la ciudad. Se intentó crear cortafuegos, derribando manzanas enteras de edificios, pero todos los esfuerzos fueron inútiles. Al final, ardieron aproximadamente 850 de los 1.080 edificios que se calcula tenía la ciudad antes del incendio. Afortunadamente, la evacuación de sus 10.000 habitantes redujo la pérdida de vidas a una sola víctima.

Ålesund en 1879

Ålesund en 1879.

La reconstrucción comenzó casi de inmediato. El incendio tuvo gran repercusión fuera de Noruega, por lo que llegó ayuda de los lugares más diversos. Aunque la principal fuente de auxilio fue la Alemania imperial de Guillermo II. El Kaiser solía veranear en Noruega, navegando a bordo del SMY Hohenzollern, su yate privado. Con las llamas aun consumiendo la ciudad, envió un primer telegrama de apoyo. Pronto fue seguido por cuatro barcos, cargados de alimentos, medicinas y utensilios, además de personal para ayudar en las labores de construcción. Ålesund fue reconstruida en piedra, levantando los edificios en el estilo modernista tan en boga en aquella época. La influencia germánica fue tan grande que incluso el estilo es conocido en Noruega con la palabra alemana Jugendstil. El resultado fue una ciudad con una traza urbana moderna, diseñada por el ingeniero Frederik Næsser, y unos edificios de estilo homogéneo. La mejor muestra de arquitectura modernista de Escandinavia.

Svaneapoteket

Svaneapoteket.

Uno de los edificios levantados en aquella época es el conocido como Svaneapoteket, o «Farmacia del Cisne», diseñado por el arquitecto noruego Hagbarth Martin Schytte-Berg. En 1984 se convirtió en el primero de la ciudad en contar con una protección especial, al contener los interiores modernistas mejor preservados de Ålesund. En 2003 fue convertido en museo y centro de interpretación del estilo artístico. Además de sus espacios interiores, permite contemplar objetos de época y diversas exposiciones, tanto fijas como temporales.

Antigua entrada de Svaneapoteket

Antigua entrada de Svaneapoteket.

Se accede al museo atravesando la antigua farmacia. El proceso me pareció un tanto caótico, aunque puede que influyera coincidir con un nutrido grupo de escolares, que desbordó completamente la capacidad organizativa del personal. En cualquier caso, los escolares desaparecieron de forma misteriosa y pude disfrutar de las salas con relativa tranquilidad.

Comedor

Comedor.

Me llamaron especialmente la atención las diversas estancias con el mobiliario original, en las que la única nota discordante era aportada por las medidas modernas de seguridad. Todo lo demás era de época, desde las lámparas hasta la vajilla, pasando por el papel pintado de las paredes o la mantelería. El nivel de detalle y mimo con el que estaban cuidados los espacios me recordó al del Museo del Pueblo Noruego, que había visitado unos días atrás en Oslo.

Jarrón (Émile Gallé)

Jarrón (Émile Gallé).

Otras salas están dedicadas a la exhibición de objetos de época. Algunos, adquiridos por el museo, otros fruto de cesiones y donaciones. La colección, aunque interesante, no es demasiado extensa, pues en aquella época Noruega no era el país rico y próspero que hoy podemos disfrutar. Además, el Jugendstil, o Estilo Joven, estaba dando sus últimas bocanadas y, tras la pesadilla de la Primera Guerra Mundial, sería sustituido por el Art Déco.

Barco vikingo

Barco vikingo.

Uno de los puntos interesantes del museo está en su sótano. Conocido como Time Machine, consiste en un conjunto de pantallas, que transportan al visitante al incendio y posterior reconstrucción de la ciudad. Pero, al ir a visitarlo, descubrí el misterio de los escolares desaparecidos. Estaban todos allí, completando el aforo y formando una larga fila en la entrada. Una de las empleadas del museo me aconsejó regresar más tarde. Aunque saliera del museo, me dejarían entrar de nuevo. Fue inútil. Cuando volví, tras dar un tranquilo paseo por la ciudad, la sala seguía colapsada. Me quedé con las ganas.

Interior de Kube

Interior de Kube.

En el cercano edificio construido en 1906 para alojar la sucursal en Ålesund del Banco de Noruega, se encuentra Kube, el Museo de Arte Contemporáneo de Møre og Romsdal. Se puede visitar con la misma entrada del Centro del Arte Modernista, pero no sé si merece la pena. Como mucho, sirve para contrastar los estilos artísticos de principios del siglo XX con los actuales. Aunque, como dicen, sobre gustos no hay nada escrito.

Antigua cervecería Bodø

Antigua cervecería Bodø.

El complemento perfecto del museo es un paseo por las calles del centro de Ålesund. Más allá del propio museo, la ciudad tiene bastantes construcciones interesantes, repartidas por una zona relativamente compacta. En la misma Aspøya, muy cerca del museo, destaca el antiguo edificio de la cervecería Bodø, construido entre 1906 y 1908.

Edificio Rønneberg

Edificio Rønneberg.

Aunque la mayor concentración se da al otro lado del Ålesundet, donde sobresalen varias construcciones aisladas, como el edificio Børse o el espléndido Rønneberg, construido en 1907 bajo la dirección del arquitecto Karl Martin Norum, lleno de detalles interesantes. Originalmente, el mar llegaba a los pies del edificio, propiedad de la más destacada familia de empresarios de Sunnmøre. Uno de sus miembros, Joachim Rønneberg, oficial del ejercito y la resistencia noruega, dirigió el célebre ataque a la planta de agua pesada de Vemork, en el que se inspiró libremente la película Los Héroes de Telemark. Una estatua en las inmediaciones del ayuntamiento recuerda sus hazañas.

Kongens gate 21

Kongens gate 21.

También es interesante recorrer Kongens gate, la agradable calle peatonal que concentra buena parte del comercio de la ciudad, flanqueada por numerosos edificios modernistas. A pesar de la indudable influencia alemana, algunos edificios muestran guiños a las tradiciones locales. Como el ubicado en la esquina de Kongens gate y Skaregata, cuyos bajorrelieves recuerdan las tallas del barco de Oseberg, del siglo IX.

Detalle del edificio Rønneberg

Detalle del edificio Rønneberg.

Siendo sincero, no creo que nadie vaya a Noruega a disfrutar de su arquitectura modernista. Además, cuando se desató el incendio, Ålesund no dejaba de ser una pequeña ciudad, en la costa de un país relativamente pobre de la periferia europea. Por tanto, su patrimonio arquitectónico de la época no es, ni con mucho, rival del de otras ciudades de Europa, como Barcelona. En cualquier caso, la combinación de una espléndida ubicación geográfica y su interesante arquitectura, hacen de Ålesund una de las ciudades más atractivas de Noruega y un perfecto contrapunto a su deslumbrante naturaleza.

Centro del Arte Modernista

Kube

Antigua cervecería Bodø

Edificio Rønneberg

Kongens gate 21

Para ampliar la información:

La página de la Ruta Europea del Modernismo tiene una breve reseña sobre la ciudad: http://www.artnouveau.eu/es/city.php?id=1.

En https://depuertoenpuerto.com/de-copenhague-a-tromso/ se puede ver todo mi viaje invernal entre Copenhague y Tromsø.

En inglés, la web oficial del Centro del Arte Modernista está en https://www.jugendstilsenteret.no/home.

El blog Heulys tiene una larga entrada, centrada en el patrimonio modernista de la ciudad: https://heulys.com/guide-to-visit-alesund-norway/.

También interesante el post en discovering disegno: https://discoveringdisegno.wordpress.com/2015/06/29/art-nouveau-alesund/.

En https://www.researchgate.net/publication/281580287_Alesund-The_Art_Nouveau_City se puede descargar un PDF sobre el incendio y la posterior reconstrucción de la ciudad.