Dentro de la peculiar geografía que caracteriza a la laguna de Venecia, la pequeña localidad de Burano sería el equivalente a un pequeño pueblo en medio del campo. Separado unos siete kilómetros de Venecia y a pesar de tener más habitantes que Murano, Burano tiene un carácter más rural. Puede que sea por su mayor lejanía de la capital, o por su actividad económica tradicional, ligada a la artesanía y la pesca. El caso es que sus pequeños canales, flanqueados por sencillas casas cuyo principal atractivo suele ser el color de su fachada, dan a Burano un aspecto que contrasta vivamente con el de la ciudad de la laguna.

San Martino

San Martino.

Burano no tiene ningún palacio y una única iglesia, San Martino, edificada en el siglo XVI, en la que llama la atención su campanario, notablemente inclinado al haber cedido parte de sus cimientos. Su principal actividad económica es la producción de encajes, que se pueden comprar en numerosas tiendas repartidas por las calles céntricas.

Calle della Madonna

Calle della Madonna.

Pero el principal atractivo de Burano son sus famosas casas de colores. Prácticamente todos los edificos están pintados en colores vivos. Unos dicen que era una tradición de los pescadores, que así podían distinguir su casa desde la distancia. Otros lo atribuyen a una extraña ordenanza, que obligaba a consultar a las autoridades sobre el color a utilizar cuando se quería pintar una fachada. El caso es que la estampa formada por las pequeñas casas, de colores a cual más chillón, reflejándose en los canales se ha convertido en un imán para el turismo.

Fondamenta Terranova

Fondamenta Terranova.

A pesar de su pequeño tamaño, en Burano no es normal encontrar las aglomeraciones de Venecia. La mayor parte de los visitantes se mueven entre el muelle del vaporetto, en Viale Marcello, y la Plaza Baldassarre Galuppi, donde se ubican tanto San Martino como el Museo del Encaje. Basta salir de esta ruta, por ejemplo dando un paseo por Riva dei Santi, para estar prácticamente solo. En cualquier caso, Burano es muy pequeño, por lo que se puede recorrer tranquilamente en un par de horas.

En nuestra excursión por la laguna, habíamos decidido comer en Burano. La oferta de restaurantes es relativamente extensa y los precios generalmente más ajustados que los de Venecia. Nos decidimos por Riva Rosa, un coqueto restaurante en la esquina de Viale Marcello y Calle Capece. Comimos en una mesa en la terraza, con una bonita vista del vecino canal.

Algunos vínculos útiles:
En este mismo blog, nuestra siguiente visita a Burano está en https://depuertoenpuerto.com/los-colores-de-burano/. Así mismo, se puede ver el itinerario completo de nuestro viaje por el Mediterráneo Oriental en https://depuertoenpuerto.com/crucero-mediterraneo-oriental/.

Página oficial de la isla (en inglés): https://www.isoladiburano.it/en/.

En la web Visitandoeuropa hay una página con bastante información práctica: http://www.visitandoeuropa.com/venecia/lugares-interes/burano

En http://actv.avmspa.it/en/content/orari-servizio-di-navigazione-0 se pueden descargar los horarios de las lineas de vaporetto. La que hace el trayecto a Burano es la 12.